LA CASADA INFIEL
Las dos facciones estaban más que definidas; la primera, denominada Frente Popular, estaba conformada por la Coalición de Partidos de Izquierdas, llamados republicanos, ya que habían sido elegidos democráticamente para presidir la II República Española. La otra, representaba a los sectores de derecha, conservadores y tradicionalistas de la alta sociedad española, cuyo nombre era el Bando Sublevado, integrado por autoridades superiores del ejército, falangistas, carlistas y todos aquellos que temían a una revolución donde los proletarios pudieran poner en peligro las riquezas y propiedades de las clases altas.
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Lo cierto es, que preparados los dos bandos, se trenzaron en una encarnizada lucha que trajo como consecuencia, más de medio millón de muertos, y otros tantos exiliados, escenificando batallas entre hermanos, tíos, sobrinos, amigos, que con diferente ideología política, no podían ponerse de acuerdo en algún sistema de gobierno.
En pleno verano de su vida, el abogado, poeta, dramaturgo, intelectual FEDERICO GARCÍA LORCA, es fusilado un 18 de agosto pero del año de 1936, exactamente al mes de iniciados los conflictos y a los dos meses y medio de haber cumplido sus treinta y ocho años de vida. Su fusilamiento, una verdadera alevosía y ventaja, se debió a su manera de pensar y sobre todo a su manera de actuar en defensa de la República instaurada. Al día de hoy, sus restos no aparecen, y lo peor es que en España no existen condenados por esos crímenes y las heridas de esta irrazonable lucha, siguen sin cicatrizar.
Amigos, lo recitaba Don Federico en LA CASADA INFIEL: “Y yo que me la llevé al río creyendo que era mozuela, pero tenía marido…”. Y la abuela decía: “la virginidad y la honradez, para perderlos basta una vez” (¡ah que mi abue..! tremenda), tengan un buen día.
¡Ánimo ingao…!
Con el respeto de siempre Julio Contreras Díaz.
Ahí les manda esto el DJ. Dice que si lo oye García… lo’rca