ESPANTOSO SISMO
Ese lunes por la tarde, ojerosos, cansados y desganados, acudimos a entregar nuestros trabajos a la Facultad de Arquitectura; eran ya las evaluaciones del semestre. Como recompensa, pasado un rato, tomamos nuestros sagrados alimentos, y caímos en los brazos de Morfeo, ya que habíamos pasado tres noches sin dormir, como era la costumbre cuando se tenía que cumplir con esos proyectos.
Toño Hermida, el famoso “muecas” (EPD), se recostó en su cama y en menos de tres minutos, quedó profundamente dormido. Perdiendo la noción del tiempo, exactamente a las 3.50 horas del martes 28 de agosto, pero de año de 1973, fuimos despertados súbitamente por un ESPANTOSO SISMO, que nos hizo salir corriendo de nuestras recámaras, para alcanzar el patio de la casa, donde ya mis padres se encontraban completamente alarmados por la intensidad y la duración de ese pinche temblor, que hizo que todo el vecindario saliera a la calle.
Dos minutos con cuarenta segundos fueron de sobresalto; Ritcher y Mercalli, no se daban abasto para detener sus escalas y lo calificaron como destructor. Un temblor ruidoso, que tuvo su epicentro a 75 kilómetros al oeste de Orizaba, con categoría trepidatorio-oscilatorio, causado por la falla tectónica conocida con el nombre de Zacamboxo (hoy puesta de moda por el proyecto de la presa del rio de Los Pescados), que corre del Océano Pacífico al Golfo de México, siendo explorada hasta las islas de Santiaguillo frente a Antón Lizardo, Municipio de Boca del Río, y la Isla Verde, merito frente al Puerto de Veracruz.
Este sismo, sorprendió a Monchín Cházaro, a Pérez Rosete, al enano Galindo, a Jorge Guevara, al Tico y algunos otros compañeros que a esa hora se encontraban trabajando en el cuarto piso de la Facultad de Arquitectura, terminando sus diseños. El sismo también desconcertó a Hermas y a Nico, que esa noche estaban felices, disfrutando de su luna de miel.
Amigos, parece que fue ayer, y bien dicen que “las cosas terminan, pero los recuerdos duran para siempre”. Tengan buen fin de semana, y por ahí del lunes nos estaremos saludando.
¡Ánimo ingao…!
Con el respeto de siempre Julio Contreras Díaz
El DJ llegó medio tembloroso, pero ha de ser por otra cosa…
Enviado desde mi iPad