¡ARRIBA ZAPATA…!
8 de Agosto 2017 martes
En el
Valle de Cuautla Estado de Morelos, en la Hacienda de San Carlos Borromeo, pasando
los días de muertos la fiesta continuaba; no era para menos, el día 4 de
noviembre, el SANTO PATRONO era adorado en misa por los jornaleros, capataces y mayordomos. Ese día
fue especial, ya que don José Ignacio Mariano Santiago Francisco de
la Torre y Mier, un opulento terrateniente apodado Nachito, estaba de
visita y en su honor le habían organizado un jaripeo.
El bragado jinete que se llevó las palmas, fue un habilidoso joven de cuerpo
atlético y con 27 años de edad (hijo de don Gabriel y de Doña Cleofas, vecinos
de Anenecuilco, perteneciente a la Villa de Ayala), llamado Emiliano Zapata Salazar.
Miliano, como le decían los que lo querían, no pasó inadvertido a los ojos del
delicado Don Nachito.
Don Ignacio era ampliamente conocido por el “finito modito de andar”; era el
protagonista número cuarenta y dos que quedó en el anonimato gracias a que era “el
yerno de su suegro”, aquella noche de otoño en que la policía hizo la
atrevida redada de travestidos en el centro de la Ciudad de México y que
provocó tragos amargos a don Porfirio y a su Amadita querida.
A Miliano, —que nació el 8 de agosto de 1879—, el consejo de ancianos le
dio el cargo de “calpuleque”, la máxima autoridad indígena; su juventud le
avala para cubrir la encomienda. Satisface por su nobleza, por su carisma, por su
lealtad, y sobre todo, por lo justiciero. En primera instancia, la obligación
era defender sus tierras, que le arrebataba la voracidad de las haciendas de Cuahuixtla
y Hospital, violando los linderos que avalaba un plano topográfico
firmado doscientos años atrás.
Su actuación no convenía a Don Pablo Escandón, que se reelegía como gobernador
del estado de Morelos, y éste, solo esperaba una mínima falta de Miliano,
para chingarlo. Más temprano que tarde, le infundieron cargos y el
ejército no dudó en llevárselo en la leva, para que cumpliera con sus
obligaciones militares.
Amigos, esta historia vale la pena ampliarla, por lo que el desenlace lo
leeremos el día de mañana, pero antes recuerden que “el hombre es un ser
indestructible, su único punto débil es la ignorancia”.
Ánimo ingao…!!!
Con el respeto de siempre Julio Contreras Díaz