EL OLIGÁRQUICO...



10 de agosto de 2017 jueves

            (segunda y última parte)

            

             Emiliano en desgracia debía cumplir su condena; el motivo: andar en estado inconveniente, ejerciendo en la vía pública aquello que decía "a gran caballo, grandes espuelas… hijos de la jijurria", cargos suficientes para que al instante lo plasmaran en el cuartel militar; nunca imaginó que presuroso lo rescataría su "hado padrino" Don Ignacio de la Torre, que después de pagar la libertad de Miliano, tenía todo el derecho de llevárselo a la hacienda de San Nicolás en el Estado de México para que le montara unas bestias cerreras y otras encomiendas facilitas de consumar.
            
               Esas inclinaciones de Ignacio no las desconocía Amadita Díaz, su esposa, la hija de don Porfirio. Años más tarde recordaría en su diario, los penosos incidentes causados por el coscolino de su marido:

                "Un día inesperadamente mi padre me mandó llamar a su despacho en su casa de Cadena. Me quería informar que Nacho, había sido capturado por la policía en una fiesta donde todos eran hombres, pero muchos estaban vestidos de mujer".  ..."quise prevenirte porque tienes derecho a saber del comportamiento con la persona que vives".

                  ¡Pamplinas!... Que bochorno para Amadita, pero más bochorno para el dictador de la mano de hierro, que era hombre "bragao", de a caballo, de pelo corto y bigote "atusao".

                  El solo hecho de que el apuesto joven arrendador de caballos, trabajara con un personaje de "costumbres raritas", despertó rumores sobre las preferencias sexuales del verdadero revolucionario, motivando a que escritores como Armando Ayala Anguiano, hiciera conjeturas que de aquella relación laboral, se derivara una relación bisexual. 

                   Pedro Ángel Palou, en su novela Zapata, en una descripción CRUDA Y CRUEL, recrea el acercamiento del REVOLUCIONARIO con el OLIGARQUICO, rompiendo todos los mitos y leyendas que se han escrito de nuestro Caudillo del Sur, asesinado a mansalva, en artera traición. 

                    Amigos, Zapata nos heredó este principio: "El que quiera ser águila, que vuele, el que quiera ser gusano que se arrastre, pero que no grite cuando lo pisen".

                    Ánimo ingao...!!!

                   Con el respeto de siempre Julio Contreras Díaz.