Tras las huellas del Piojito

Por Soledad García Morales. 

Este texto se basa en las reseñas elaboradas en 2016 tras los recorridos que el Círculo organizó con el propósito de aproximar los vestigios del patrimonio ferroviario regional al público en general. Sin embargo, con anterioridad, algunos integrantes de la agrupación como los arquitectos Gregorio Jácome y Julio Contreras, el Mtro. Martín Blázquez, Agustín Fragoso, los colaboradores del Museo Comunitario de Teocelo y otros amigos, realizamos investigación de escritorio y de campo que nos llevaron a reconocer físicamente la ruta de “El Piojito” que, al día de hoy, es posible presentarles.

Primer tramo 

El sábado 9 de abril se realizó la primera caminata de la ruta del ferrocarril de vapor conocido con el sobrenombre de “El Piojito”; nombre que posiblemente aludía a su color y pequeñez. El punto de reunión fue el salón-cantina “La Estrella de Oro” localizado en la antigua calle de Galena hoy Constitución. La concurrencia fue abundante pues se congregaron 47 personas entre adultos, jóvenes y una pequeña. Asistieron integrantes de diversas asociaciones e instituciones como la Facultad de Historia de la Universidad Veracruzana, el Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales de la U.V., grupos de excursionistas, seguidores de Coatepec Antiguo, así como otras personas interesadas en la ruta.

El grupo frente al salón cantina Estrella de Oro. Foto: Alemaro Martínez, 2016.
Recepción de la estatua de Miguel Hidalgo en el andén de la estación Coatepec, 1910. Fondo Soledad García Morales.


 El contingente comenzó a caminar en línea recta por las calles de Constitución y Cuauhtémoc hasta llegar a la intersección con el río Los pintores, antes del cementerio municipal, punto donde se realizó la primera charla. Tras ella, el grupo se dirigió por la calle Rivera de Cuauhtémoc para internarse en un camino que actualmente tiene construcciones y casas habitación, pero que más adelante está lleno de vegetación y de sembradíos cuyo aroma y colorido deleita los sentidos del transeúnte. Camino que mucho tiempo atrás causó admiración a los visitantes por la belleza del paisaje y la abundante producción que se extendía por los campos.

 El punto siguiente fue la estación de paso Zimpizahua que, en sus mejores tiempos, sirvió para conducir a pasajeros y carga de productos como café, plátano, azúcar, naranja, piloncillo y otros productos que provenían de la hacienda de igual nombre. Hoy desafortunadamente se encuentra en total abandono y cubierta de maleza. En este lugar, las explicaciones de carácter técnico e histórico estuvieron a cargo del guía, arquitecto Julio Contreras Díaz, quien a lo largo del recorrido hizo uso de la palabra para enfatizar la importancia de algunos de los vestigios que todavía pueden notarse. También participaron en los comentarios el maestro Paulo César López y la doctora Soledad García Morales. 

De Zimpizahua se prosiguió por la carretera donde se caminó poco más de un kilómetro hasta llegar cerca del campo deportivo de Las Puentes donde aún queda vestigio de una alcantarilla construida con bloques de piedra, iguales a los que se utilizaron en todos los puentes por donde transitó el ferrocarril. En Las Puentes se pudo admirar las ruinas de la estación y el depósito de combustible que alimentaba las locomotoras. En dicho sitio se cargaban los productos que producía la Fábrica de Hilados y Tejidos de las Puentes, fundada en el año de 1882 y alimentada por la energía hidráulica del río Huehueyapan. El río es el límite entre los municipios de Coatepec y Xico y en la ribera de esta corriente se admiró las viguetas de fierro que todavía sostienen un puente y los aproveches de sillería que basa la estructura. 

La caminata se continuó hasta llegar al puente tendido sobre el río Calpixcan donde se observó también la construcción del puente. Finalmente llegamos a la gasolinera de San Marcos donde concluyó esta caminata histórica en la cual admiramos y constatamos parte de la ruta por la cual transitó el Piojito por espacio de 47 años, llevando en sus vagones de carga los productos de la región y en los de pasajeros a lugareños y personalidades que visitaron la región durante los últimos años del siglo XIX y casi la primera mitad del siglo XX 

Articulo completo y más fotografías en: https://bit.ly/3eucCd8