Iglesia de Guadalupe

 Por Jorge Vela

En los albores del siglo XIX, México intentaba consolidarse como un país independiente a pesar de los problemas económicos y políticos que le presionaban. Por si esas dificultades no fueran suficientes, en 1833, la epidemia de cólera morbus azotó la nación, lacerando a amplios sectores de la población y creando un ambiente en el cual, las autoridades civiles y religiosas, buscaban contrarrestar los efectos devastadores. (Méndez Maín, 2016) Una de las medidas precautorias fue el establecimiento de nuevos panteones fuera de los centros urbanos, dejando sin funcionamiento los cementerios anexos a los templos, como el ubicado en el atrio de la parroquia de San Jerónimo. Pero, otra de las acciones, sentaría el precedente para la construcción de un santuario dedicado a la Virgen de Guadalupe. 

Vista del templo desde la calle de Aldama. En primer plano, la escuela primaria "Miguel Hidalgo". Fotóg. Jorge Vela, 2022.


La pandemia arribó en agosto de ese año, al puerto de Veracruz, y en cuestión de días, se presentaron los primeros casos en la región coatepecana. La preocupación no era infundada: el mal ocasionaba la muerte en cuestión de horas y no existía cura conocida. Ante ello la sociedad coatepecana recurrió a la fé para afrontar la calamidad, celebrando misas y procesiones con el objeto de obtener la gracia divina que apaciguara los terribles efectos. En cuestión de semanas el cólera se diezmó y esto fue visto como un mismísimo milagro. Agradecidos, los coatepecanos decidieron retribuir el divino favor con un templo dedicado a la Virgen de Guadalupe. La manda dio el primer paso para materializarse en 1839 con la compra del predio que actualmente ostenta el templo. Un año después se iniciaron los trabajos constructivos, bajo la guía de Don Cirilo Portillo, los cuales por diversas situaciones como la intervención norteamericana de 1847, demoraron 13 años en finalizar. (García Morales & Blásquez Ojeda, 2013)

    En 1853, el templo de estilo neoclásico fue inaugurado, siendo este una de las mejoras materiales que el Presbítero Antonio Mateo Rebolledo, canónigo de primer orden, natural y vecino de Coatepec, gestionó para la entonces villa. Poseía dos torres, tres naves y una cúpula además de un gusto austero y elegante. El nuevo recinto se convirtió en el segundo templo erigido en el poblado y, al tiempo, adquirió mayor relevancia cuando se le dotó de una fuente pública. Las fuentes eran verdaderos puntos de referencia urbano, tal como lo expone la ilustre escritora María Enriqueta (1927), cerca de 1880:


«La fuente en la esquina del atrio de la parroquia, y la otra en la esquina de la Virgen de Guadalupe, están ante mis ojos, frescas, como cuando yo de chiquilla me asomaba a ellas» 


No obstante, esta pintoresca escena cambiaría cuando se modernizó el servicio de agua potable. La fuente ya no prestaba un servicio imprescindible en el pueblo y, excusándose en ello, fue derruida con el fin de favorecer el acceso al atrio.  


Iglesia, ca. 1900. Fondo Soledad García Morales
Vista moderna del templo. Fotóg. Jorge Vela, 2020



Sería al final del siglo XIX que la estructura del templo se vio afectada, probablemente por causas sísmicas. La fachada amenazaba con desprenderse del cuerpo principal y para restituir su aplomo, se le dotó de un contrafuerte. Este elemento consistió en una torre en cuyo entramado se instaló un vestíbulo y un coro. La nueva fachada, eminentemente neogótica, presenta elementos florales que, a decir del arq. Jácome Rodríguez (2018), son alegoría de las bromelias utilizadas en la elaboración de los arcos monumentales de San Jerónimo. El interior del templo también fue dotado de profusos motivos vegetales y geométricos, así como de dos retablos y un baldaquino que resguarda la imagen de la Virgen María.  En 1986, el pintor Enrique Zoza, elaboró el mural sobre el altar, cuya temática fue la advocación mariana del recinto. La última intervención del templo se ejecutó en 2018, cuando el Patronato Pro-mejoras restituyó elementos y dio mantenimiento general al edificio. Al día de hoy, el santuario es uno de los más bellos templos de la región, cuya devoción concentra cada diciembre, a millares de feligreses que se congregan con el propósito de prestarse ante la Virgen de Guadalupe. 


Interior del templo. Fondo Soledad García Morales 


Vista actual del templo. Fotóg. Jorge Vela, 2020.



Bibliografía

Camarillo y Roa, M. E. (1927). Carta a Justino Palacios.

García Morales, S., & Blásquez Ojeda, J. M. (2013). Estudio preliminar y facsimil de los "Apuntes históricos y geográficos de la villa de Coatepec-1864" de Antonio Mateo Rebolledo. Coatepec: Imprenta Toscana.

Jácome Rodríguez, G. (2018). Iglesia de Guadalupe. (J. Vela, Entrevistador)

Méndez Maín, S. M. (2016). Crónica de una epidemia anunciada: el cólera de 1833 en la ciudad de Veracruz. Sígnos históricos, 44-79.